Otro de los horizontes que marca la agenda 2030 de la Organización de Naciones Unidas tiene que ver con mejorar nuestro mercado laboral y avanzar sosteniblemente a nivel económico.
El empleo es la principal fuente de recursos de las familias en nuestro país.
El empleo de calidad, con buenos salarios y condiciones laborales, acaba siendo determinante para activar el consumo y la actividad del tejido empresarial, por lo que poner el foco en el empleo es imprescindible para fortalecer la economía de nuestro país.
En este aspecto, desde el Instituto Lectura Fácil pensamos que es importante poner la atención en 2 cuestiones principales:
- El acceso al empleo de personas con discapacidad intelectual.
Justo hoy la Encuesta de Población Activa señala que estamos creando menos empleo que años anteriores, aunque el desempleo no crece, no son buenas señales para nuestro mercado laboral.
Sobre todo, cuando el empleo que existe es cada vez de menos calidad.
Si para cualquier persona resulta complejo hoy día encontrar un buen puesto de trabajo, para las personas que sufren de prejuicios por tener distintas capacidades se ha convertido en una misión casi imposible.
Según el Observatorio del Servicio Público de Empleo las personas con discapacidad están mayoritariamente excluidas del mercado laboral.
Además, si profundizamos en los datos del año pasado, vemos como la discapacidad intelectual presenta una de las tasas de actividad y de empleo más bajas (casi 4 puntos y 6 puntos respecto a las cifras de discapacidad general).
Esto es insostenible. Necesitamos empresas sensibilizadas con la discapacidad y comprometidas con la inclusión.
Con herramientas como la señalización accesible o la lectura fácil, todas las personas tenemos cabida en el mercado laboral.
Pero no solo las empresas tienen que comprometerse, necesitamos que las instituciones públicas incrementen su apuesta por la formación para el empleo para personas con discapacidad.
El Instituto Lectura Fácil tiene una amplia experiencia en la materia, ya son varios los materiales para obtener certificados profesionales que hemos adaptado a lectura fácil.
Así, las personas con discapacidad pueden aprender lo necesario para manipular alimentos o para entender las tareas de reciclaje y aspirar a tener un puesto de trabajo en condiciones de igualdad.
Puedes consultar nuestro Manual básico de reciclaje y gestión de residuos en lectura fácil en el siguiente enlace web: https://www.cedd.net/es/documentacion/ver-seleccion-novedad/536292/
- El potencial de la accesibilidad cognitiva para el crecimiento y la consolidación de empresas en nuestro país.
El derecho a comprender tiene mucho que aportar al ámbito de la empresa.
No solo es básico repensar la forma en la que las empresas se comunican con sus clientes para conseguir aumentar la confianza y el conocimiento de sus productos, las empresas deberían conocer el potencial en términos de ahorro que tienen las herramientas del derecho a comprender.
Estas herramientas, concretamente el lenguaje claro y la señalización accesible, permitirían a las empresas destinar los recursos humanos y materiales de resolver dudas generadas por sus propios documentos, a realizar otras tareas verdaderamente productivas.
Porque si un texto está en lenguaje claro, se entiende, y si un edificio está bien señalizado no hace falta destinar a nadie a atender a las personas para guiarlas por el edificio.
En estos casos mientras hablamos de derechos, también estamos hablando de un ahorro.
Las herramientas para hacer del mercado de trabajo un espacio inclusivo que permita desarrollarnos a todos y a todas en igualdad ya existen y tienen un recorrido, como hemos podido señalar.
De cara a los objetivos marcados para el año 2030 solo necesitamos compromiso y visión estratégica para optimizar los recursos con los que contamos. En este contexto, las herramientas de la accesibilidad cognitiva son fundamentales.